En anteriores talleres habéis preguntado qué tipo de música podéis ofrecer a vuestros pequeños.
Hoy os voy a dar mi opinión y reflexiones sobre el tema. Espero que os sea útil, y si tenéis otros puntos de vista os agradecería que nos lo comentéis. ¡Seguro que enriquecemos la discusión!
¿Qué música ofrecer? Aspectos que marcan la diferencia
Mi opinión es que cuanto más variedad escuchemos, mucho mejor. Cuando escuchamos música, lo que hacemos es ampliar nuestro "vocabulario" musical. Si siempre escuchamos el mismo tipo de canciones (por ejemplo, música infantil), habría muchas sonoridades que no llegaríamos a oír: instrumentos, compases, ritmos, armonías, estructuras musicales...
Igual que ofrecemos un lenguaje verbal rico, con todo tipo de estructuras gramaticales, e igual que queremos que nuestros hijos aprendan varios idiomas; con la música deberíamos proponernos los mismos objetivos, puesto que estamos enriqueciendo su mundo sonoro.
Un elemento que para mí es fundamental, es la grabación e interpretación de la música. Son mucho más interesantes las grabaciones en las que haya instrumentos reales y no instrumentos midi. Esto lo encontramos sobretodo en grabaciones de música infantil: hay un sintetizador de fondo, que intenta imitar el sonido de instrumentos reales, y algunas veces muy poco conseguido, la verdad. Si los pequeños tienen la oportunidad de escuchar instrumentos reales, permitimos que los conozcan y más adelante los podrán reconocer auditivamente. No sólo es escuchar música, también educar.
Y por supuesto, la calidad musical. No voy a entrar en estilos o artistas mejores o peores, porque creo que es muy subjetivo, pero estaremos de acuerdo en que la interpretación debe ser buena: afinación, ritmo... Nosotros somos modelos para nuestros hijos, y también lo que les ofrecemos. Si escuchan cantos desafinados, ellos cantarán desafinado...Creo que es muy importante que tengamos en cuenta qué exponemos a nuestros hijos e hijas, en todos los ámbitos.
Distintos tipos de música... diferentes objetivos
En el último taller de Música para bebés llevamos varios CD, de todo tipo de estilos. Todos ellos nos pueden aportar cosas distintas.
Canciones infantiles:
Mantener vivo nuestro repertorio tradicional es conservar nuestra identidad cultural, y además nos permite explicar aspectos de nuestra historia o cultura (canciones de campo, de distintos oficios, etc). Tanto las tradicionales como las de reciente creación nos ayudan a aprender vocabulario, el esquema corporal, hábitos, etc.
Músicas del mundo:
En un mundo globalizado como es el nuestro, conocer las distintas culturas nos enriquece y fomenta el respeto hacia ellas. Escuchar músicas de distintos países permite a los pequeños que amplíen muchísimo su abanico de sonoridades (ritmos, armonías, instrumentos, lenguas...). ¡Es como si aprendieran distintos idiomas!
Música de los papás y mamás:
Los pequeños ven cómo nosotros disfrutamos de la música, como la cantamos y bailamos...y con ello ya estamos lanzando un mensaje. Podemos poner variedad de estilos, que enriquecen el vocabulario musical (compases, armonías, estructuras musicales...) y que permiten conocer varios instrumentos.
Música clásica:
Para mí (mi humilde opinión...), la música clásica es una más... no la más importante o enriquecedora (porque en la variedad está la riqueza...). Creo que es importante ofrecer variedad dentro de este ámbito: música de cámara, orquesta sinfónica, solistas, ópera, etc... Y también tener en cuenta qué pretendemos con ella. Lo digo porque a veces ponemos "música clásica" para relajar a un bebé y no nos damos cuenta que la pieza que hemos puesto tiene muchos cambios de dinámica, un ritmo rápido, etc...¡esto no va a ayudar a relajar a nuestro pequeño! Sería más apropiado un tema tranquilo, de un solista (por ejemplo, una pieza de Chopin al piano), sin cambios abruptos de ritmo o de dinámica... Así que fijaos en estos aspectos. Dentro de este estilo, podemos encontrar la música descriptiva. Para mí es muy útil para realizar audiciones activas o jugar con la música. Ejemplos son: "Pedro y el lobo" de Mussorgsky, o "El carnaval de los animales" de Saint-Saëns. Con este tipo de música, podemos sentarnos con nuestros hijos a contar una historia, representarla, dibujarla, etc. Es música que nos permite de forma fácil e intuitiva hacer mucho más que escuchar (aprender vocabulario, desarrollo motor, desarrollar la atención, etc). Os lo recomiendo si queréis disfrutar de la música en casa de una forma más profunda.
Música en directo
Vosotros y vosotras ya lo habéis experimentado...la música en directo siempre es mejor que una grabación, puesto que nos transmite muchísimo más.
Para los pequeños, además de recibir la música a través de todos los sentidos, les permite conocer los instrumentos de forma real (sí, les podemos enseñar una foto de un contrabajo...¿pero ellos se dan cuenta que es mucho más grande que el violín? ¿Pueden comprobar que en la orquesta hay más violines que contrabajos? es más difícil...) y ver cómo se tocan. También ven la organización de los músicos, y cómo se entienden de una forma no verbal para tocar juntos.